AFLICCIONES

AFLICCIONES.

Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciera. 

1 Pedro 4:12

Cuando no entendemos las circunstancias que nos rodean, es fácil que las alarmas de la vida nos agiten.

La generación de Pedro experimentó lo mismo. Su advertencia era sensilla: No os sorprendáis del fuego de prueba (1Pedro 4:12)

Puede que las pruebas y las penas de la vida suenen como un llamado a huir o a responder de una manera desalentadora y destructivas.

Pero haríamos bien en escuchar más de cerca a nuestro Señor, porque Él ha prometido estar con nosotros todos los días de nuestra vida (Mt. 28:20) y no nos extrañemos de las pruebas ya que son parte de nuestro caminar con Cristo. 1 Pedro 4.16 dice si alguno padece como cristiano, no se avergüence, sino glorifique a Dios por ello. 

Puede que la prueba no sea más que un recordatorio de que nuestra confianza ha de estar en Dios, no en las personas. Podemos confiar en Él en esos momentos cuando las alarmas comienzan a sonar.

LOS DESAFÍOS DE LA VIDA NO ESTÁN DISEÑADOS PARA QUEBRARNOS SINO PARA INCLINARNOS HACIA DIOS.

Pasen un bendecido dia.

Dev. R.de L.

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